Las competiciones de casos clínicos como acción formativa en el sector sanitario
Día tras día, constatamos como todavía hay demasiada tendencia a aplicar esquemas de estilo directivo, dando soluciones, dando directrices, dando órdenes y apoyándose en la propia experiencia. Con frecuencia actuamos ante un problema como si sólo existiera una solución y esa solución sólo la tuviera yo. Los últimos años se está hablando y escribiendo mucho sobre el coaching y se está invirtiendo en coaching, pero tenemos la sensación de que conocemos la teoría y olvidamos la práctica. En algunos casos nos asusta vercomo lo único que se ha logrado es instaurar en la organización el concepto de coaching mítico, que consiste en que toda la organización habla y opina sobre el coaching, pero casi nadie lo practica. El coaching es la llave para logar ese cambio tan necesario en nuestras organizaciones, para conseguir pasar de la óptica de la obediencia a la óptica de la responsabilidad.
De la obediencia a la responsabilidad Para logar este cambio necesitamos potenciar la creatividad y el desarrollo de nuestros colaboradores, en definitiva buscar la expansión del capital humano. Tenemos excelentes profesionales en nuestros equipos que están rindiendo por debajo de sus posibilidades y lo que es peor, arrastrando una cierta frustración. Colaboradores que quieren y pueden hacer más y están pidiendo una oportunidad. Ante está situación, el coaching puede y debe ayudar a todos en esa tarea de potenciar y desarrollar a nuestros colaboradores. Cuando preguntamos por qué no se aplica más el coaching, nos encontramos con frecuencia con estas dos respuestas:
- En está organizaciónno hay cultura de coaching. Por supuesto que son dos barreras personales o excusas, porque el coaching se puede aplicar en cualquier organización, cultura o estructura, solo se necesita creer en él y querer aplicarlo. En cuanto a la escasez de tiempo, quizás no hemos sido capaces de transmitir con claridad que el coaching no necesita un tiempo o espacio específico, que el coaching es una filosofía de trabajo que cualquier directivo puede y debe integrar en su gestión diaria. El coaching como tal no es nada nuevo. Tiene unas profundas raíces históricasen Sócrates y su filosofía en el arte de la mayéutica. El coaching busca provocar en nuestro pupilo (Coachee) el descubrimiento de sus potenciales actuales y futuros y proyectarle hacia una actuación excelente. Busca potenciar el auto conocimiento y desarrollar en el pupilo (coachee) la capacidad de pensar por sí mismo.
No existe el enseñar, sólo el aprender Por eso, tal como afirma Robert Dilts “Un buen Coach casi nunca da recetas, ni soluciones”. El coaching es la antítesis del ordenoy mando. El Gerente de Áreaque integra el coaching en su estilo de gestión puede aplicarlo en:
Aplicar coaching en el trabajo de campo, significa abandonar viejos hábitos o rutinas que con frecuencia seguimos utilizando, tales como:
En definitiva, estilo directivo y enfoquesque todos somos conscientes de que no funciona, pero que a pesar de ello, se siguen utilizando día tras día. Para hacer coaching tenemos que cambiar ciertos hábitos yorientarse a:
Para hacer coaching es necesario creer en las personas y en sus posibilidades, olvidando los viejos esquemas de que ante un problema “solo hay una solución y la tengo yo”. Entendemos que la mayoría de estas barreras parten de que con frecuencia no se ha sabido hacer la transferencia de la sala al puesto de trabajo. Hemos explicado muy bien la teoría pero quizás ha faltado un aprendizaje en escenarios prácticos, adaptados a la cultura y realidad de cada compañía.
Esto supone la puesta en marcha de planes de desarrollo concretos y asumidos por parte del coachee, porque mientras el pupilo no asuma que el plan de acciónle interesa y beneficia le estaremos proyectando hacia un cumplimiento burocrático o formal. Y el coaching pretende proyectar al pupilo hacia un cumplimiento excelente. Desde aquí, queremos crear la inquietud en el colectivo de gerentes de área de que pueden mejorar el rendimiento y desarrollo de sus equipos, integrando el coaching en su estilo de dirección y en su trabajo diario. El Gerente como Coach deberá desarrollar las habilidades de:
Tener las competencias adecuadas para ello no es fácil, pero es cuestión de poner en marcha los resortes necesarios:
En este punto debemos tener presente que desarrollar planes de mejora personal nunca será urgente pero es muy importante, por eso, si no figuran en la agenda con fechas, corren el riesgo de un aplazamiento continuado.
Bibliografía: |
Cuando veo a mi hijo de 7 años regresar a casa con sus deberes, o cuando escucho a los padres de sus amigos hablar sobre los cuadernos Santillana, me transporto a mi propia infancia. Recuerdo las aulas tradicionales con sus pizarras verdes, los pupitres...